Decepción

El sábado fuí a ver la nueva película de Steven Soderbergh sobre Che Guevara.

¡Qué decepción! Realmente esperaba más del director de Sexo, mentiras y cintas de vídeo o Traffic. Pero es que pedirle a un yankee que haga una película sobre un revolucionario argentino es como pedirle a Sazatornil que haga de Santiago Carrillo.

Lo mejor de la película sin duda es el gran Benicio, pero su estrella se va diluyendo como un azucarillo entre batallas y paseos por la selva. Al final de una historia que se debería haber contado sobre alguien que realmente intentó cambiar el mundo se acaba conviertiendo en una película de Acción Bolchevique, vamos una empanada mental tremenda. No se adentra en la relación entre el Che y Castro, ni la situación política del momento, sus contactos con los rusos o la desazón del protagonista, su carisma. Nada, al final se tira una hora asaltando el cuartel de Santa Clara y punto.

Nada que ver con el maravilloso film Diarios de una motocicleta del director Walter Salles. Relata la odisea por Latinoamérica llevada a cabo por Ernesto "Che" Guevara y su amigo el Dr. Alberto Granado en 1952, cuando Guevara era un joven estudiante de medicina de 23 años. Ambos embarcaron en un viaje de 9 meses recorriendo América del Sur en una destartalada moto Norton de 500 cc, a la que apodaban "La poderosa". Melles, a traves del actor mexicano Gael García, sí que consigue adentrarse en el origen de la figura del Che. Con una fotografía maravillosa nos hace sentir el dolor, la impotencia de la pobre Latinoamérica y el porqué del giro hacia la izquierda revolucionaria de un joven Guevara. Es una película que te hace respirar libertad a pulmón abierto.

Por cierto, ayer estuve en las traineras y disfruté de lo lindo. Saqué muchas fotos que mañana incluiré en el blog. JOder vaya cara se les quedó a los Euskos con la paliza que les dieron los de Castro